URGENT

ESTADOS UNIDOS « ¡El pueblo estadounidense no quiere entrar en guerra! » Entrevista con Nancy Wohlforth, copresidenta del US Labor Against War

US Labor Against War », « Movimiento obrero estadounidense contra la guerra », es una coalición de organizaciones laborales (que representan a 2 millones de sindicalistas) formada en vísperas de la invasión estadounidense de Irak. Nancy Wohlforth ha tenido responsabilidades nacionales en el sindicato OPEIU y fue miembro del ejecutivo nacional de la confederación sindical estadounidense AFL-CIO.

— Donald Trump ha puesto al mundo entero al borde de una guerra contra Irán. ¿Cómo analizas lo que acaba de suceder?

— Trump se embarcó en esta escalada de guerra después de retirarse, unilateralmente, del Acuerdo con Irán, sobre las armas nucleares. Rápidamente se hizo muy claro que él quería la guerra.

El bombardeo de campamentos militantes en el norte de Irak el 29 de diciembre 2019, fue una provocación que precipitó una gran crisis, que nos llevó al borde de una guerra abierta con Irán. Esta situación se hizo aún más aterradora por el hecho de que en la Casa Blanca tenemos un verdadero orate que tiene el control sobre la utilización del arma nuclear.

Señalemos de paso que, esta crisis en torno a Irán durante las últimas tres semanas también tuvo como objetivo desviar la atención del proceso de destitución (“impeachment”) en curso contra Trump.

Dicho lo cual, Trump, al menos por ahora, ha tenido que dar marcha atrás. El pueblo estadounidense no quiere entrar en guerra. Esto se ha expresado en diversas encuestas, pero también a través de la rápida reacción de un movimiento antiguerra unido, que salió a las calles el 4 de enero en 90 ciudades de los Estados Unidos, reuniendo a docenas de miles de personas que exigían: « ¡No a la guerra contra Irán! » ¡Retorno inmediato de todas las tropas estadounidenses! « 

Pero el peligro de una gran guerra no ha desaparecido. Trump es tan inestable que podría organizar una nueva provocación en cualquier momento.

Y es necesario que nosotros demos otra dimensión a esta batalla contra la guerra en Irán: me refiero a las sanciones económicas contra las exportaciones de petróleo de Irán hacia Europa y otros lugares. Estas sanciones, que cuentan con el apoyo de funcionarios electos Demócratas y Republicanos en el Parlamento, han devastado la economía iraní, en detrimento, en particular, de las mujeres y los niños de los estratos más pobres. El número de muertes como producto directo de estas sanciones sigue siendo desconocido.

Muchos parlamentarios esperan que el Congreso (el parlamento de los Estados Unidos) exija que sea respetado su poder de decisión sobre una declaración de guerra y, por lo tanto, poner a Trump bajo control. ¿Tú qué piensas?

Dado que es un loco quien está al timón, es comprensible que los funcionarios electos y los militantes estén buscando todas las formas de poner a Trump bajo control. Pero hay que decir que tal situación no debería existir. Una persona, independientemente del partido al que ella adhiera, no debería tener todo el poder de iniciar una guerra contra un país como Irán.

Sin embargo, dar el poder de decisión sobre la guerra al Parlamento no resolverá el problema. Estados Unidos lanzó su guerra contra Irak en 2003 con la aprobación de la gran mayoría del Congreso de los Estados Unidos. Sólo hubo unas pocas voces discrepantes en contra de esta decisión, como por ejemplo la diputada Barbara Lee y el senador Bernie Sanders. Millones de personas murieron o fueron expulsadas de sus hogares por la guerra contra Irak luego de un voto en el Congreso.

La única forma de acabar con estas guerras y las intervenciones militares de los Estados Unidos. Es cerrar todas las bases estadounidenses en todo el mundo, repatriar de inmediato a todas las tropas estadounidenses, reducir drásticamente el presupuesto militar y volver a una economía pacífica aquí en nuestro país, con un período de transición adecuado para terminar con el complejo industrial militar.

US Labor Against War contra la guerra fue reactivado recientemente. Participas activamente en los preparativos para la jornada de acción mundial contra la guerra en Irán el 25 de enero. ¿Podrías hablarnos de esta iniciativa?

Tenemos un nuevo grupo de sindicalistas más jóvenes que participan en la dirección y en la animación de USLAW. Es muy importante. La semana pasada, participamos en una Conferencia de Reflexión Colectiva que reunió a 1200 participantes. Hemos redactado una resolución contra la guerra en Irán que puede ser utilizada por todos los sindicatos afiliados a USLAW. Me enteré de que este proyecto de resolución contra la guerra en Irán acababa de ser aprobado por el Consejo Laboral de San Francisco (leer en el recuadro – ndlr). Ahora nos estamos preparando activamente para la Jornada Día Mundial contra la Guerra el 25 de enero, que está organizado en unidad por el movimiento contra la guerra, lo cual es muy alentador. 

Aunque el peligro inmediato de una guerra abierta ha disminuido, esperamos una participación significativa en esta manifestación aquí en Washington, ya que la gente entiende que el gobierno de los Estados Unidos podría lanzar una nueva guerra en cualquier continente en cualquier momento.

Espero que el Comité Obrero Internacional contra la Guerra y la Explotación para la Internacional Obrera dé a conocer ampliamente esta jornada de acción contra la guerra y que los sindicatos y coaliciones contra la guerra tomen iniciativas y organicen las acciones que consideren adecuadas.

Tú misma apoyas este Comité Obrero Internacional y firmaste el llamamiento por la Conferencia Mundial contra la Guerra y la Explotación (que se realizará en París, 5-6 de noviembre de 2020). ¿Puedes hablarnos de esta iniciativa?

El llamado a esta Conferencia ha sido refrendado por sindicalistas y organizaciones políticas de horizontes diversos en más de cincuenta países. Será un espacio para reagrupar, organizar una respuesta unida contra la guerra, la explotación, el trabajo precario, y los tratados de libre comercio en todos los continentes.

Más que nunca necesitamos unidad para derrotar a los traficantes de guerra y a los explotadores. Ahora debemos organizarnos para convencer a nuestros sindicatos y organizaciones de que apoyen esta Conferencia Mundial y recaudar fondos para enviar las delegaciones más amplias.

Entrevista realizada el 16 de enero por Alan Benjamin


Resolución en apoyo del nuevo movimiento por la paz contra la guerra

Considerando que el presidente Trump puso en alerta al mundo entero y llevó a los Estados Unidos al umbral de la guerra debido al asesinato del general iraní Qasem Soleiman en un acto irresponsable;

Considerando que el presidente Trump ha amenazado con lanzar un ataque contra sitios culturales iraníes, lo que constituiría un crimen de guerra si esta amenaza se concretizara;

Considerando que la administración Trump aprobó recientemente un presupuesto militar que, con sus 738 mil millones de dólares supera la suma total de los presupuestos militares acumulativos de todos los países del mundo y esto a pesar de la lucha incesante de los trabajadores por la cobertura salud, la vivienda y mejores salarios;

Considerando que según el Wall Street Journal, los Estados Unidos bajo los gobiernos Demócrata y Republicano han dedicado más de 5600 mil millones de dólares en la participación en los conflictos posteriores a los ataques del 11 de septiembre de 2001;

Considerando los incalculables perjuicios causados en el Oriente Medio, con la pérdida de cientos de miles de vidas humanas, incluida una gran mayoría de ciudadanos iraquíes inocentes;

Considerando que las organizaciones sindicales, voz de la clase obrera organizada continúan su combate por una economía más digna y justa, por los derechos civiles, por la justicia social, la igualdad racial y una verdadera democracia, aquí en nuestro país,

Considerando que la AFL-CIO ha adoptado en dos ocasiones resoluciones contra la guerra en sus Convenciones nacionales y comparó los costos de la guerra con la necesidad de financiar las necesidades de los trabajadores;

Considerando que US Labor Against the War, organización nacional constituida por sindicatos y otras organizaciones del movimiento sindical formada en enero de 2003 para oponerse a las amenazas de guerra en Irak por el presidente George Bush, contribuyó a la adopción en 2005 de la resolución histórica en la Convención nacional AFL-CIO;

Considerando que, en más de 90 ciudades de los Estados Unidos, miles de personas salieron a las calles el 4 de enero de 2020 para clamar su exigencia « no a la guerra en Irán », creando así las condiciones que permiten la aparición de un nuevo movimiento antiguerra;

Se decide que el Consejo Laboral de San Francisco asuma la resolución 50 adoptada por la AFL-CIO durante su Convención nacional de 2017, que se pronuncia por una política exterior basada en la solidaridad obrera internacional, la soberanía nacional, así como el respeto mutuo entre todas las naciones y hace un llamamiento al presidente y al Congreso de los Estados Unidos para que no utilicen la guerra salvo como último recurso en la esfera de las relaciones internacionales y busquen todas las posibilidades de paz y reconciliación;

En fin, el Consejo Laboral de San Francisco decide asociarse al llamado por una Jornada mundial contra la guerra. ¡No a la guerra contra Irán! – el sábado 25 de enero de 2020 e invitará a todos sus delegados a participar.