GRECIA « ¡Eran estudiantes! ¡Abajo el gobierno de asesinos!
« Llámame cuando llegues »: esta frase se ha convertido en el símbolo de la revuelta surgida después del accidente de tren del 28 de febrero, que costó la vida de cincuenta y siete pasajeros, en su mayoría estudiantes. 65 000 trabajadores y jóvenes manifestaron en toda Grecia el 8 de marzo. En Atenas, la plaza Syntagma, frente al Parlamento, recordaba las manifestaciones de 2010-2011 contra los planes de austeridad de la troika (FMI, Comisión Europea y Banco Central Europeo).
Amenazado por la revuelta, el Primer ministro Mitsotakis (Nueva Democracia, derecha) intenta poner cara de valiente: « Pido disculpas personalmente, pero también en nombre de todos los que han gobernado el país durante años ». Una disculpa criticada como « tardía » por el principal partido de « izquierda », Syriza. Sin embargo, Syriza tiene tanta responsabilidad como la derecha y el partido « socialista » Pasok. No obstante, Syriza tiene tanta responsabilidad como la derecha y el partido « socialista » Pasok en la privatización de los ferrocarriles que condujo al accidente de Tempi. La privatización comenzó en 2005 bajo un gobierno de derechas, continuó en 2010 con el Pasok, aplicando los planes de austeridad de la Comisión Europea y del FMI, y se completó en 2017 con el gobierno de Syriza, que vendió los ferrocarriles a la empresa italiana FS.
La Asociación de Estudiantes de Atenas convocó a las primeras concentraciones del 4 de marzo, a las que se unieron los sindicatos de profesores y ferroviarios. La dirección del sindicato de marinos denunció las mismas condiciones catastróficas y la falta de personal en su sector. Los sindicatos de los servicios públicos (ADEDY) y la Bolsa de Trabajo de Atenas convocaron a una huelga de 24 horas el 8 de marzo, al igual que los marinos y los conductores de autobuses y trolebuses del Ática. En los ferrocarriles, en huelga desde el 2 de marzo, fue renovada, al menos hasta el 8 de marzo. De hecho, es imposible que circule ningún tren porque todos los informes después del accidente demuestran que ¡los dispositivos básicos de seguridad no funcionan en ninguna parte! De tal suerte, decenas de miles de jóvenes y de trabajadores salieron a la calle, a pesar de la brutal represión policial de las manifestaciones. El 8 de marzo en Atenas, la Asociación de Estudiantes se manifestó detrás de una pancarta que decía: « ¡Eran estudiantes! ¡Abajo el gobierno de los asesinos! ¡La privatización mata! ». Y como en 2010-2011 contra los memorandos de austeridad, hubo manifestaciones en toda Grecia. En Nauplia (14 000 habitantes), en el Peloponeso septentrional, en la tarde del 8 de marzo, varias organizaciones – los sindicatos de trabajadores hospitalarios y de profesores, el Partido Comunista y organizaciones de mujeres – convocaron una manifestación. 600 trabajadores, jubilados y jóvenes respondieron. Fue la manifestación más multitudinaria en mucho tiempo. Entre las reivindicaciones: « ¡Vosotros contáis vuestros beneficios, nosotros contamos las víctimas! », « Syriza- Pasok-Nueva Democracia: este crimen tiene historia ».
Con nuestros corresponsales en Grecia