URGENT

PUERTO RICO ¡Apoyo a los trabajadores de servicios públicos del sindicato UTIER en Puerto Rico!

Artículo publicado originalmente en el n°30 de la Carta semanal The Organizer de los Estados Unidos, firmado por Carol Wheeler. 

Al momento en que la Unión de Trabajadores Eléctricos y de la Irri- gación de Puerto Rico (UTIER), sindicato que festeja su 79o aniver- sario, sus miembros libran una feroz batalla para salvar la red eléctrica de Puerto Rico de los efectos devasta- dores de la privatización. 

El 22 de junio de 2020, los diri- gentes de la empresa de servicios públicos – Puerto Rico Electric Power Authority (PREPA) – firma- ron un contrato con LUMA Energy Corp., un conglomerado privado estadounidense-canadiense, para ope- rar y mantener el sistema de trans- misión y distribución de energía. 

La PREPA era una empresa de servicios públicos desde hacía más de 80 años. Las deudas masivas, el deterioro de la infraestructura y, en última instancia, la devastación causada por el huracán María en 2017 le dieron al gobierno de Estados Unidos y a las grandes empresas la oportunidad de lo que habían estado buscando durante algún tiempo: privatizar completamente la red eléctrica de Puerto Rico y de la PREPA. 

Una previsión de 20 000 millones de dólares en fondos federales de emergencia distribuidos a través de FEMA permitirá a LUMA Corp. utilizar la catástrofe del huracán María para enriquecer a sus accionistas mientras hace lo mínimo para resolver los problemas a los que está confrontada la red eléctrica de Puerto Rico. 

El contrato firmado entre LUMA y el gobierno puertorriqueño pone en cuestión el convenio colectivo de más de 3 000 trabajadores, organizados en la Unión de Trabajadores Eléctricos y de la Irrigación de Puerto Rico (UTIER), así como su plan de jubilaciones. Además, el empresario podrá elegir un « representante preferente de los trabaja- dores ». 

Redactado a puerta cerrada, sin la aportación de los responsables electos ante los puertorriqueños, el contrato transforma de hecho un servicio público en un monopolio privado. Permite a LUMA determinar unilateralmente el tipo de enería que se introducirá en la red y no ofrece ningún mandato, ni siquiera incentivo, para cumplir los objetivos locales y federales en materia de energías renovables. 

Lo más grave es que LUMA no tiene ninguna obligación de permanecer en Puerto Rico en caso de desastre natural. LUMA podría in- cumplir sus compromisos y dejar a Puerto Rico sin compañía eléctrica. 

Los trabajadores del sindicato UTIER llevan meses en huelga. Salieron a la calle con otros sindica- tos del sector público y privado para exigir la anulación del contrato con LUMA. Advirtieron que el acuerdo LUMA aumentaría el coste de la electricidad y destruiría los puestos de trabajo y los medios de vida de miles de trabajadores y sus familias. Han estado a la cabeza movilizaciones masivas, jornadas nacionales de protesta e incluso una huelga general nacional. 

El movimiento masivo de resistencia impidió a LUMA reclutar suficientes trabajadores para funcionar eficazmente. Sin embargo, han surgido nuevos problemas con otros sindicatos, algunos de ellos estrechamente vinculados a LUMA, que amenazan con enviar « trabajadores de sustitución » para que traspasen los piquetes de huelga establecidos por la UTIER, desmantelen su sindicato y firmen un acuerdo favorable a la empresa. 

El presidente de la UTIER, Ángel Figueroa-Jaramillo, lanzó una clara advertencia contra cualquier intento de este tipo: « Consideraremos como rompehuelgas a cualquier contratista o empleado que acepte trabajar para LUMA, sindicalizado o no, y denunciaremos estas acciones a nivel nacional e internacional y tomaremos todas las medidas autorizadas por la ley. » 

Los trabajadores en huelga de la UTIER necesitan nuestro apoyo. Eduardo Rosario, presidente de la sección de Nueva York del Consejo Laboral para la Defensa de los Trabajadores Latinoamericanos (LCLAA/ AFL-CIO), hizo un llamamiento público a la solidaridad sindical internacional: 

« El objetivo de privatizar la PREPA, o cualquier otro servicio público, es eliminar la responsabilidad democrática y explotar al pueblo de Puerto Rico y los recursos de la nación con fines de lucro. El ba- lance es claro. En todo el mundo, la privatización nunca ha beneficiado al pueblo. 

Hacemos un llamamiento al movimiento obrero internacional para que exija claramente: 

¡No a la privatización de la PREPA! 

¡Anulación inmediata del contrato PREPA-LUMA y reincorporación de todos los trabajadores de UTIER a sus puestos de trabajo con salarios atrasados y plenos derechos! 

¡No a los rompehuelgas (vengan de donde vengan) y a los rompe sindicatos! 

Sí a la UTIER » .