ESTADOS UNIDOS “Nuestra única prioridad es China”

Pete Heghset, ministro de la Defensa de los EEUU, en una reunión con sus aliados de la OTAN, definió así la política que Washington desea poner en práctica: como primera medida, y a partir del 4 de marzo, la aplicación de aranceles del 20% afectará a las mercancías chinas que entren a los Estados Unidos.

Esos nuevos aranceles serán suplementarios a los instaurados en el primer mandato de Trump, los cuales continuaron y se intensificaron durante los cuatro años de Biden.

¿Por qué China y por qué sacudir un orden mundial dominado ya por las multinacionales estadounidenses y el dólar?

Explicación del secretario de Estado (ministro de Relaciones Exteriores) estadounidense, Marco Rubio, frente al Senado: “El orden mundial de la post-guerra no solo es obsoleto, sino que se ha convertido en un arma utilizada contra nosotros”, ya que “hemos aceptado al Partido Comunista Chino en el orden mundial, ha aprovechado todas las ventajas e ignorado todas las obligaciones y responsabilidades”. Reconoce sin embargo que China “nos ha servido mucho”, haciendo referencia a los explotadores capitalistas de las multinacionales que han podido aprovechar los bajos costos de la fuerza de trabajo de decenas de millones de obreros privados de derechos por los burócratas de Partido comunista chino en el poder. Hoy en día, sin embargo, la crisis del imperialismo ha llegado a tal punto que, precisa Rubio, “debemos recurrir de nuevo a crear un mundo libre a partir del caos”

Porque a pesar de que los dirigentes del Partido comunista han mimado mucho al sector privado, prometiendo maravillas a los capitalistas, la economía china no reposa aún en el “libre mercado”, sino en la propiedad de Estado: más del 80% de la actividad económica, en valor, es el producto de la propiedad del Estado o pública y por lo tanto bajo control del Partido comunista. Desde el punto de vista de los capitalistas estadounidenses, en China hay demasiados obstáculos para la “libertad de mercado”: la propiedad de Estado, el plan quinquenal, el monopolio del comercio exterior, las listas negativas *, así como los mercados públicos, todos esos sectores donde los capitalistas no están autorizados a invertir… En una palabra, esa economía no es “libre y abierta” y no respeta “sus obligaciones” a los ojos de Trump y compañía.

Antes de dejar la presidencia, Biden había anunciado una serie de medidas destinadas a reforzar las prohibiciones de exportación de microchips de alta gama a China. También lanzó una investigación para sancionar una decisión de Pekín que pretendía reagrupar dos astilleros navales públicos. Estimaba que esta “práctica desleal” ¡dañaba los intereses de los Estados Unidos! Apostamos a que Trump y sus amigos harán aún peor…

Inmediatamente después de la investidura de Trump, y pretendiendo hacer bien las cosas, Rubio convocó en Washington a los miembros de la alianza llamada del Quad. Los gobiernos de Australia, India, Japón y Estados Unidos reiteraron su “compromiso común para reforzar una región en el indo-pacífico, libre y abierta”. “Las cuestiones de minerales críticos y de s

eguridad de las cadenas de suministro” quedan por su lado bajo el control de otra alianza estadounidense, esta es militar, llamada Aukus, alianza militar anti-china que reúne a los gobiernos australiano, británico y estadounidense.

Alain Denizo

* Lista oficial de los sectores de la economía en los que las inversiones extranjeras están limitadas o prohibidas.