Volkswagen: “Y ahora, la cólera”

Dossier establecido por H.-W Shuster

Para aumentar sus ganancias, Volkswagen anuncia la supresión de decenas de miles de empleos

En Alemania, el constructor de automóviles Volkswagen (VW) emplea 120,000 asalariados en diez centros de producción. Noventa y cinco por ciento de esos trabajadores están sindicalizados en IG Metall.

Oponiéndose a la reivindicación de un aumento de salario del 7% propuesto por IG Metall en todo el sector metalúrgico, la dirección de VW alega un “derrumbe” de sus beneficios. Sin embargo, los tuvieron a profusión, ya que en el 2023 ¡el grupo distribuyó 4,500 millones de euros de dividendos a sus accionarios!

Pero como nada es bastante para los capitalistas, la dirección dice “necesitar de un financiamiento” de 4 a 5 mil millones de euros. Para ello, anunció el cierre de tres fábricas, la reducción de  los salarios en un 10% y el congelamiento de salarios en el período 2025-2026. Pone en entredicho la garantía del empleo, en vigor desde hace más de treinta años, con el propósito de proceder a despidos desde el año próximo.

La política de los dirigentes del Partido social-demócrata (SPD)

Después de este anuncio, el jefe del gobierno federal, el canciller Scholz (SPD), declaró que él está por mantener los empleos. El ministro-presidente SPD del Land de Baja Sajonia se pronuncia también por mantener todas las fábricas y solicita que “todas las partes contribuyan a la solución de la crisis”. El 30 de octubre, la dirección de IG Metall se congratuló por esas tomas de posición.

Pero el “acuerdo” que piden los dirigentes del SPD es un regalo envenenado. Proponen, a cambio de mantener los empleos, que los trabajadores acepten una reducción masiva de salarios. Pero todo el mundo sabe que aceptar una disminución de los salarios nunca ha salvado un solo empleo.

Sin embargo, tanto el Land de Baja Sajonia dirigida por el SPD, como la dirección de IG Metall, podrían oponerse a los planes de la dirección apoyándose en la ley Volkswagen. La ley de 1960, cuando VW fue privatizada, ofrece garantías a los trabajadores: el Land de Baja Sajonia detiene 20% de las acciones del grupo. Y en el consejo de vigilancia del grupo, donde toda decisión depende de una mayoría de cuatro quintas partes, los sindicatos disponen de diez de los veinte escaños, y por lo tanto un derecho de veto.

¡Pero ni el SPD ni la dirección de IG Metall quieren, hasta ahora, utilizar esta capacidad!

La única barrera: la lucha de clases

Resumiendo el estado de ánimo de los trabajadores, el sindicalista de IG Metall Luigi Catapano explica: “Primero, llegó el temor, luego la decepción, porque nunca habíamos visto todo esto en la Volkswagen. Ahora, es la cólera”.

Los trabajadores escucharon las declaraciones de los patrones en relación con un “cambio de época en la industria”. Saben que, solamente a causa del automóvil eléctrico, 140,000 empleos suplementarios podrían ser suprimidos de aquí al 2035, cuando 50,000 han sido ya destruidos desde el 2019.

Las primeras huelgas de esta semana muestran una gran movilización y una gran combatividad. Entonces, una cuestión decisiva está planteada: ¿la dirección del sindicato va a oponer a este ataque frontal del capital la combatividad y la unidad de los trabajadores, tanto en VW como en todo el sector metalúrgico?

Participando a la cumbre convocada por Scholz el 29 de octubre, con el patrón de VW, la presidente de IG Metall reclamó subvenciones públicas: “que se levante ahora el freno al endeudamiento, o bien que se cree un fondo especial”.

Pero se trata de preservar todos los empleos sin baja de salarios, un sindicato consciente de su historia debería exigir al Estado la renacionalización inmediata, sin indemnización ni compra del grupo Volkswagen. Esa es la respuesta que esperan los trabajadores.

“Si el salario baja, la ganancia aumenta” (Karl Marx)

El conflicto que los capitalistas emprenden en la Volkswagen tiene un solo objetivo: aumentar las ganancias reduciendo el “costo del trabajo”.

Sabemos que “si el salario se modifica, la ganancia se modificará en sentido inverso. Si el salario baja, la ganancia aumenta; si el salario aumenta, la ganancia baja” (Karl Marx, Salario, precio y ganancia).

En la Volkswagen, la fuerza organizada de los trabajadores permitió arrancar conquistas elevadas. Hoy, para los capitalistas, esas conquistas deben ser liquidadas con el fin de aumentar sus ganancias.

Para ello, deben caer todas las barreras. Así, el Partido liberal FDP (miembro del gobierno de coalición dirigido por el social-demócrata Scholz) exige: “El Estado debería privatizar completamente VW”

Los capitalistas y sus gobiernos luchan por la reducción brutal del “costo del trabajo”. Para ello intensifican la destrucción de las fuerzas productivas, la desindustrialización, las deslocalizaciones, y la desreglamentación. Es una desvalorización brutal de la mercancía “fuerza de trabajo”.

H.-W. Shuster