URGENT

¡Libertad para las mujeres estadounidenses!
¡Libertad para las mujeres afganas!
¡Libertad para las mujeres en todo el mundo!

ESTADOS UNIDOS

“¡Manos quietas y cabeza gacha, ¡no toque nuestros cuerpos!“, “¡El aborto es nuestro derecho a la salud!“

Frente a la Corte Suprema en Washington, el 3 de mayo: ¡“Mantener el derecho al aborto en condiciones de seguridad”!

En cuanto la prensa filtró la intención de los jueces reaccionarios de la Corte Supremo de cuestionar el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo (aborto), miles, luego cientos de miles de mujeres y hombres, a veces junto con los sindicatos, salieron a las calles de todo Estados Unidos. El 15 de mayo tendrán lugar importantes manifestaciones para defender este derecho democrático. 

“¡Manos quietas y cabeza gacha, ¡no toque nuestros cuerpos!“, “¡El aborto es nuestro derecho a la salud!“ En la tarde del lunes 2 de mayo, poco después de que se filtrara a la prensa el plan de la Corte Suprema de los Estados Unidos de anular el caso Roe contra Wade (la decisión de la Corte Suprema de 1973 que protege el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo), se celebraron concentraciones ante la Corte Suprema y los Tribunales Federales de todo el país. 

« Nos negamos a que la Corte Suprema de los Estados Unidos niegue la humanidad de las mujeres y destruya sus derechos », se podía leer en una gran pancarta que colgaba del Palacio de Justicia en la plaza Foley en Nueva York. « Las libertades democráticas y los derechos reproductivos están inextricablemente unidos », declararon los responsables sindicales en una concentración de los sindicatos de la zona de la bahía de San Francisco frente al edificio de la Administración gubernamental de Oakland (California). Afirmando también que, « Un ataque a los derechos reproductivos de las mujeres es un ataque directo a todos los trabajadores »

El derecho de autodeterminación de las mujeres está amenazado 

Frente a la Corte Suprema en Washington, el 3 de mayo: ¡“El aborto es esencial”! 

Si el Corte Suprema impusiera su voluntad, más de 100 millones de mujeres perderían el acceso al aborto legal con supervisión médica, particularmente en casi todos los Estados del Sur y en muchos del Medio Oeste. El derecho al aborto puede prohibirse, o es probable que se prohíba, en veintiséis Estados (de un total de cincuenta) a través de las leyes existentes o de enmiendas constitucionales ya aplicadas. Estas leyes son ataques al derecho de toda mujer a controlar su propio cuerpo y su futuro. Reducen a las mujeres a una propiedad, imponiéndoles responsabilidades reproductivas y de crianza si se embarazan, u obligándolas a tomar la traumática decisión de abandonar a sus hijos. Estas leyes representan una « guerra contra las mujeres ». 

El 70 % de las mujeres de hoy en día en los Estados Unidos crecieron durante una época en la que la decisión Roe de 1973 estaba en vigor. Ellas han combatido Estado por Estado contra los intentos de restringir el acceso al derecho al aborto, o incluso de prohibirlo. Esto es aún más cierto si se tiene en cuenta que en el 90 % de los condados (divisiones territoriales dentro de los Estados) no existe, hoy en día, ninguna clínica dónde se pueda ejercer el derecho al aborto. Cuando el gobierno federal cortó los fondos públicos de estos establecimientos en 1976, se requirió la recaudación de fondos privados para proporcionar acceso al aborto a las mujeres más pobres. 

Un puñado de jueces reaccionarios pretende decidir por las mujeres 

Pero casi nadie esperaba que una mayoría de los jueces de la Corte Suprema, a pesar de ser muy conservadora, fuera lo suficientemente audaz como cuestionar el decreto Roe. 

La propuesta del juez Alito no sólo muestra un total desprecio por las mujeres, sino también una estrecha lectura de la Constitución utilizada simplemente como un manual de dogma bíblico inamovible, y no como un documento que debe interpretarse a la luz de la evolución de la sociedad. 

Para sustentar su proyecto, el juez Alito se basa en una jurisprudencia que data del siglo XIII, en la época del derecho consuetudinario inglés, una época en la que las mujeres eran consideradas propiedad de sus maridos. Todo ello para concluir que históricamente el aborto es, a su juicio, »un crimen ». Entre las citas más escandalosas de Alito está la del inglés Sir Edward Coke (siglo XVII), según la cual el aborto es « un delito odioso, calificado como felonía ». El mismo Coke es el autor de las leyes inglesas sobre de brujería inglesas, que castigando con la muerte a mujeres y niños. 

Nueva York, el 3 de mayo: “Refutamos que la Corte Suprema de los Estados Unidos niegue la humanidad de las mujeres y liquide sus derechos ». Los manifestantes alborean los rostros de los jueces de la Corte Suprema.

Las mujeres no tienen nada que esperar del Partido Demócrata

La inminente decisión de la Corte Suprema podría ser contrarrestada por una legislación federal que sustituyera las leyes anti aborto aprobadas en los Estados. Las mujeres y los hombres que protestan en todo el país se preguntan: « ¿Dónde está Biden? », “¿Dónde está la Ley de Protección de la Salud de la Mujer (WHPA) » que garantizaría el derecho al aborto? 

Pero ¿qué pueden esperar las mujeres del Partido Demócrata, el mismo que niega a los negros sus derechos, que rechaza tomar cualquier medida para garantizar las necesidades básicas de casi un tercio de la población estadounidense que vive en la inseguridad alimentaria y sanitaria? ¿Un partido que vota sistemáticamente por guerras de saqueo contra los pueblos del mundo? 

La clase obrera y todos los oprimidos son los que más tienen que perder con este asunto. 

Liz Shuler, presidenta de la AFL-CIO, declaró: « Necesitamos poder controlar nuestros propioscuerpos« , señalando « el impacto directo que tal decisión tendría en la justicia social y en la capacidad de los trabajadores para mejorar sus vidas y las de sus familias« . 

Muy bien, pero la cuestión central del movimiento sindical sigue siendo: « ¿De qué lado estás?” Ya es hora de que Liz Shuler y otros dirigentes del movimiento obrero rompan con los demócratas y demuestren que están realmente del lado de las mujeres y de toda la clase obrera, no sólo con palabras sino con hechos. 

Es urgente mostrar, en nuestras movilizaciones, nuestro poder político, no eligiendo demócratas, sino construyendo nuestro propio partido político, un partido de la clase obrera enraizado en el movimiento sindical y para los oprimidos. Un partido independiente de la clase capitalista dirigente y del Partido Demócrata que sirve a sus intereses.

De nuestra corresponsal en Estados Unidos, Mya Shone, activista de Socialist Organizer

¿Que es Roe v. Wade?

Roe contra Wade es el caso que estableció el derecho al aborto como un derecho « fundamental ». Hasta la decisión de la Corte Suprema de 22 de enero de 1973, no existía una protección federal de este derecho. El aborto era ilegal en treinta Estados, y los veinte restantes tenían leyes que permitían el aborto en circunstancias a menudo restrictivas.

Con su decisión de 1973, la Corte Suprema dejó en manos de la propia mujer la decisión de interrumpir un embarazo antes del punto de « viabilidad » en el que un feto puede sobrevivir fuera del útero, que ahora se considera de veintitrés semanas. Antes de 1973, la Academia Americana de Ginecólogos y Obstetras estimaba que 1,2 millones de mujeres estadounidenses se sometían a abortos ilegales cada año. Estos abortos ilegales provocaban hasta 5000 muertes al año. 

Leyes estatales contra el aborto
Los ejemplos de Texas y Alabama 

Una de cada diez mujeres estadounidenses vive en Texas. La nueva ley de « latidos del corazón » de Texas de septiembre de 2021 (que la Corte Suprema ratificó, superando cualquier impugnación legal) anima a los ciudadanos a denunciar y perseguir a cualquiera que realice un aborto más de seis semanas después de la concepción, sin excepciones por violación, abuso sexual, incesto o diagnóstico de una anomalía fetal. Cualquiera que ayude a una mujer a abortar de cualquier manera (un amigo que haya ayudado económicamente, un taxista que haya llevado a la paciente al médico, etc.) también puede ser condenado. Sin embargo, seis semanas después de la concepción, la mayoría de las mujeres no saben que están embarazadas. Entre el 85% y el 90% de las mujeres que abortan en Texas tienen al menos seis semanas de embarazo. 

El Estado de Alabama allanó el camino para la prohibición total del aborto cuando se firmó su « Ley de Protección de la Vida Humana » el 15 de mayo de 2019. Esta ley afirma que la « personalidad » comienza en la concepción y no hace ninguna excepción a la prohibición del aborto, ni siquiera en el caso de los embarazos resultantes de una violación o un incesto. Como resultado, cualquier médico que realice o intente realizar un aborto es considerado como « criminal » y se enfrenta a una pena de nÁventa y nueve años de prisión. 

AFGANISTÁN 

Los talibanes imponen el velo integral y exigen que las mujeres « se queden en casa”

Mujeres vestidas con el burka en Hérat (Afganistán, 2009) 

El 7 de mayo2022, el gobierno talibán promulgó un decreto que obliga a las mujeres a llevar velos integrales que enmascaren todo el rostro excepto los ojos. Pero esto sigue siendo demasiado y el decreto establece que « es mejor que se queden en casa ». Esta decisión se produce después de la decisión del 23 de marzo que expulsó a millones de niñas de la escuela. 

Los talibanes, una milicia fanática fabricada en los años 90 por los servicios de inteligencia paquistaníes, volvieron al poder en agosto de 2021, tras el acuerdo de los presidentes estadounidenses Trump y Biden. 

Como recuerdan los militantes de la Izquierda Radical Afgana (RLA): « Tras veinte años de ocupación militar (2001-2021), los Estados Unidos decidieron devolver el poder a los talibanes. Organizaron una campaña masiva en los medios de comunicación para hacer a los talibanes « presentables », afirmando que sus prácticas habían cambiado. Los Estados Unidos se mostraron « optimista » ante la posibilidad de que los talibanes dejen de restringir las libertades, de oponerse a los derechos de las mujeres y de interferir en su derecho al trabajo o en su presencia en la sociedad. Los Estados Unidos firmaron un « acuerdo de paz » con los talibanes en febrero de 2020 en Doha, Qatar, y les devolvió el poder en agosto de 2021 tras la retirada de las fuerzas de la OTAN. Al día siguiente de su regreso al poder, los talibanes impusieron severas restricciones a los derechos de las mujeres (…) Los talibanes no han cambiado desde la década de 1990. Saben que las mujeres alfabetizadas y educadas no aceptarán estar confinadas en casa: querrán trabajar y ganarse la vida, liberarse de la esclavitud de los hombres mediante la independencia financiera y luchar por la igualdad de derechos y la libertad”. 

Es necesario recordar que el 31 de agosto de 2021, tras entregar Kabul a los talibanes, Joe Biden se atrevió a declarar: « Seguiremos defendiendo los derechos fundamentales del pueblo afgano, especialmente de las mujeres y las niñas (…). Y he sido claro: los derechos humanos estarán en el centro de nuestra política exterior”. 

Los militantes de la Izquierda Radical Afgana (ARL), que participaron en las manifestaciones en Kabul contra las medidas anti mujeres, tienen razón al decir: « El pueblo afgano no tiene ninguna esperanza en la llamada “comunidad internacional” porque es responsable de su destino. El pueblo afgano sólo puede apoyarse en las fuerzas progresistas, democráticas y laicas, en el « Movimiento Espontáneo de Protesta de las Mujeres » y en la solidaridad de los trabajadores y las mujeres de todo el mundo. Mañana, el pueblo afgano derrocará la tiranía misógina y medieval de los talibanes »

Artículo publicado en La Tribune des travailleurs (Francia) 

FRANCIA

El POID organizó una concentración el 9 de mayo frente a la embajada de los Estados Unidos para denunciar la vergonzosa intención de los jueces de la Corte Suprema de los Estados Unidos de cuestionar el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo.

El POID organizó una concentración el 9 de mayo frente a la embajada de los Estados Unidos.

Christel Keiser, secretaria nacional del POID, en su intervención en el acto, destacó los increíbles argumentos utilizados por la Corte Suprema para justificar su decisión: una jurisprudencia que se remonta al siglo XVIII, cuando las mujeres eran legalmente propiedad de sus maridos, dijo: « Hoy seguimos en una sociedad dominada por los hombres, una sociedad que puede calificarse de patriarcal y que decide por las mujeres. Una sociedad patriarcal, en la que las mujeres deben seguir siendo propiedad de facto de sus cónyuges, al igual que los medios de producción deben seguir siendo propiedad privada de los capitalistas. Y es por ello que esta sociedad puede pretender obligar a las mujeres a continuar con un embarazo no deseado. 

Igualmente hizo referencia a la situación en Francia y a las medidas urgentes que debería tomar un gobierno obrero, tanto en Francia como en los Estados Unidos: « El derecho al aborto debe ser defendido incondicionalmente, tanto jurídicamente como en la práctica. En Francia, este derecho existe desde 1975. Una conquista democrática obtenida gracias a la movilización de las asociaciones de mujeres, pero también de las organizaciones del movimiento obrero. Inicialmente muy restrictivo, el derecho al aborto se ha ido haciendo accesible a todas las mujeres. 

Sin embargo, ¿podemos decir que todas las mujeres que necesitan un aborto pueden acceder a él en Francia hoy en día? ¡Por supuesto que no! 

Los centros de práctica del aborto han cerrando uno tras otro, cierres vinculados a la reestructuración de los hospitales, al cierre de las unidades de maternidad (cuando se cierra una unidad de maternidad, se cierra un centro de práctica del aborto) y a la reducción de puestos de trabajo. Desde 2017, el 8% de los establecimientos que realizan abortos han cerrado, es decir, 130 centros. Muchos departamentos no disponen de un centro de aborto, lo que obliga a las mujeres a desplazarse decenas o incluso cientos de kilómetros. 

Esta situación es el resultado de la política llevada a cabo por los sucesivos gobiernos durante décadas y agravada por el gobierno Macron-Castex-Véran, una política que estrangula financieramente a los hospitales públicos, las maternidades y los centros de aborto y que degrada las condiciones de trabajo del personal. Vimos las consecuencias de esta política durante la epidemia de Covid, y la vemos hoy con el anuncio del cierre de varios servicios de Urgencias en todo el país. 

Y mientras tanto, el dinero fluye a las manos de los capitalistas. Se les han otorgado 607 000 millones desde el comienzo de la pandemia, miles de millones para organizar los planes de despido. 

Frente a la amenaza del Tribunal Supremo, surge una cuestión inmediata: la de la movilización masiva para mantener el aborto. Más allá de esta movilización, se plantea otra cuestión: tanto en Estados Unidos como en Francia, ¿qué gobierno restablecerá realmente el derecho al aborto? 

En los Estados Unidos, Biden critica la decisión de la Corte Suprema. Dice que fomenta la movilización. Pero, ¿por qué no impulsa una legislación federal que pueda contrarrestar la decisión de la Corte Suprema y sustituir las leyes anti aborto aprobadas en varios Estados? Tiene el poder, pero se niega a hacerlo. En cuanto a las organizaciones sindicales, que apoyaron la elección de Biden, ¿pueden subordinar sus acciones a las decisiones – o no decisiones – del presidente? 

En Francia, el derecho al aborto para todas implica una decisión: la de asignar los recursos financieros necesarios y, por tanto, la reapertura de los centros de aborto cerrados, la apertura de todos los centros de aborto con el personal necesario para satisfacer las necesidades de las mujeres. Y esta decisión supone una ruptura con la política que se ha seguido durante décadas y la confiscación de los miles de millones ofrecidos a los capitalistas para destinarlos a las necesidades de las mujeres. 

Esta es la lucha del POID en Francia. La democracia es la ley de la mayoría. Y un gobierno mayoritario debe poner todos los medios para que sean respetados los derechos de las mujeres, y en particular el derecho al aborto. 

Por casualidad de las fechas, hoy ha entrado en vigor un decreto emitido el 7 de mayo por el gobierno talibán de Afganistán, que obliga a las mujeres a llevar velos integrales que enmascaren todo el rostro menos los ojos. El decreto afirma incluso que « es mejor que se queden en casa » (…). Los talibanes (…) volvieron al poder en agosto de 2021, tras el acuerdo de los presidentes estadounidenses Trump y Biden. Presidentes belicistas, hoy en Ucrania, ayer en Irak y Afganistán. 

Contra las guerras imperialistas, contra la explotación capitalista, por la defensa de los derechos de las mujeres se ha convocado una Conferencia Internacional para finales de octubre de 2022 por la defensa de los derechos de las mujeres trabajadoras a la iniciativa de Rubina Jamil, secretaria general de la APTUF de Pakistán y por mi misma, secretaria del POID. 

Conferencia en la que participarán en particular militantes obreras estadounidenses que informarán sobre su combate por la defensa al aborto. (…) El 14 de mayo próximo, inmensas manifestaciones tendrán lugar en los Estados Unidos por la defensa del derecho al aborto. 

El POID aporta su apoyo a las mujeres – y hombres – que se manifestarán el 14 de mayo en los Estados Unidos para defender un derecho inalienable. 

¡Libertad para las mujeres afganas! 

¡Libertad para abortar para las mujeres en los Estados Unidos! 

¡Libertad para todas las mujeres, contra la doble opresión y la explotación capitalista de la que son víctimas!

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